El personaje: Julen Lopetegui.

- Está viviendo una dulce etapa en el Sevilla F.C., después de haber fracasado en el Real Madrid y ser la comidilla de todos por su plantón a la selección española en pleno Mundial de Rusia 2018. La verdad es que no estuvo fino en ese momento. 

A Julen Lopetegui Agote le empezamos a conocer los de nuestra generación como un portero normalucho que llegó a representar a clubes como Barça, Real Madrid o Real Sociedad. Sin embargo, solo alcanzaría su mayor fama como guardameta de la Liga Española con Logroñés y Rayo Vallecano, llegando a entrenar a los últimos para iniciarse en el mundo de los banquillos. Y de ahí pasó a lo que conocemos hoy en día.

Lopetegui defendió la portería del Barça.

- Nació un buen día en la localidad guipuzcoana de Asteasu, el 28 de agosto de 1966. Su carrera como jugador se desarrolló entre 1983 y los inicios del nuevo milenio, alcanzando una buena fama bajo palos cuando defendía los intereses del Logroñés en una de sus mejores etapas como equipo de Primera División. 

Su nombre se perdería en el tiempo, siendo recordado como uno de los grandes fiascos que jugó para los dos grandes de España y cuya pista sería perdida en el Rayo Vallecano, que es donde empezaría su trayectoria de entrenador en 2003, tras haber colaborado con las categorías menores de la selección nacional de España. Después volvería a trabajar con los equipos de "La Roja" habiendo entrenado al Castilla durante una campaña.

Aceptaría un gran reto para dirigir al Oporto en Portugal, aprovechando su gran talante formador para buscar la gloria como técnico de uno de los clubes más competitivos de Europa. No obstante, aprovecharía la mínima oportunidad para volver a la selección nacional.

Lopetegui ocuparía el lugar de un campeón del mundo como Vicente Del Bosque, quien vivió el fin de los grandes logros de "La Roja". El nuevo técnico trataría de recuperar el prestigio perdido una vez finalizada la Euro de Francia 2016.

Se prepararía a conciencia para afrontar el que probablemente hubiera sido el mayor desafío de su carrera como entrenador, clasificando a España para disputar la Copa del Mundo de Rusia 2018.

Él sería el elegido de comandar la nave española por aquel Mundial, pero en vísperas del gran campeonato saltarían todas las alarmas al conocerse su intención de fichar por el Real Madrid antes de aterrizar en Rusia.

Por todos los medios se pediría la cabeza de Julen Lopetegui, quien se vería obligado a ceder su cargo sin haber disputado un solo partido. Es más, el seleccionador debería abandonar el avión casi en pleno vuelo. 

Todo fueron críticas, y lo cierto es que Julen no estuvo muy acertado en su maniobra por dirigir al equipo blanco, de modo que su lugar en la selección lo ocuparía otro nombre sagrado de la "Casa Blanca", Fernando Hierro.

La verdad es que fue todo muy surrealista. A partir de entonces empezamos a conocer el lado más oculto de Lopetegui, un hombre grandote que entre lágrimas sería presentado como nuevo entrenador del Real Madrid.

Le vimos celebrar goles desde la banda como si fuera Silvester Stallone en Rocky IV, e incluso guarda algún parecido con el actor norteamericano. Pero toda acción, reacción y ejecución sería inútil para dirigir a los Gareth Bale, Sergio Ramos, Karim Benzema y Toni Kroos entre otros. Las cosas no le irían bien en la capital española.

 

Julen Lopetegui protagonizó uno de los mayores escándalos en la historia de la selección española.

- Quizás fuese cosa del karma, pero Julen no aguantaría en el Madrid más de diez jornadas, siendo sucedido por Santiago Solari para que más tarde llegase Zinedine Zidane. Su paso por Chamartín es uno de los fracasos más sonados de la historia. 

Una de cal y otra de arena, puesto que el guipuzcoano se resarciría cogiendo las riendas del Sevilla en junio de 2019. Le ha ido de maravilla por Híspalis, manejando sensatamente a un gran equipo con el que en el curso 2019\20 conquistaría la Europa League. Parece que el arranque de la nueva temporada va por buen camino, y se puede decir que Julen Lopetegui ya es feliz.