- Han llovido unos años,... casi ya treinta. Hay que echar mucho la vista atrás para que la afición española recuerde una de las noches más aciagas de la historia, la del 12 de octubre de 1991. A la mayoría aún les escuece aquella derrota.
España perdería ante la selección francesa la única oportunidad de poder asistir a la Eurocopa de 1992. Los medios de aquella noche tan desesperante reflejaban un cabreo monumental, como por ejemplo, el diario Marca, que resaltaba una inesperada derrota en Sevilla, una ciudad en la que el combinado nacional parecía invencible... hasta que llegó la selección vecina con Jean Pierre Papin.
Lance del partido entre España y Francia. |
Por hacer un repaso rápido de la fase clasificatoria para la UEFA Euro de Suecia 92, a España le había tocado un grupo en la que se mediría con selecciones como la de Checoslovaquia, Islandia, Albania y la bestia negra del grupo: Francia. A simple vista parecía un caminito de rosas para "La Roja", aunque nada más lejos de la realidad.
Se empezó ganando por la mínima a una floja selección islandesa (2-1), pero pronto les bajarían de las nubes a los chicos de Suárez, pues en el siguiente partido, Checoslovaquia ganaría por 3-2. Se vinieron arriba venciendo a Albania por 9-0, pero Francia e Islandia (en la vuelta), acabarían poniendo a los españoles en la cuerda floja.
Aún quedaban los partidos de vuelta ante Francia, Checoslovaquia y Albania. Ante los checoslovacos ya no tendrían posibilidad alguna de pasar, mientras que contra los últimos no llegarían ni a jugar debido a los problemas que habían en Yugoslavia por entonces, en plena secesión.
Y es que antes de aquellos partidos, España se lo jugaría todo ante Francia. No cabía otra opción que ganar en el estadio Benito Villamarín, cuyas gradas se habían llenado para dar el último aliento a los jugadores.
Por el bando español estaban los Andoni Zubizarreta, Martín Vázquez, Manolo, Emilio Butragueño, Solozabal y Fernando Hierro entre otros. En los vecinos estaban hombres como Manuel Amoros, Éric Cantona, Jean Pierre Papin, Laurent Blanc y un jovencísimo Didier Deschamps. El drama ya se olía incluso antes de que el eslovaco Vojtech Christov diese el pitido inicial.
Y es que no tardaría en asomarse el desastre nacional. El equipo galo se adelantaría por un tempranero gol de Luis Fernández en el minuto 12 de partido, firmando la sentencia Papin tres minutos después.
A los españoles no les quedaba otra que agarrarse a un milagro como el que les había llevado a la Eurocopa de 1984, pero Francia no era Malta. Abelardo albergaría esperanzas con un gol a los 33 minutos, pero ya no habría más.
El resto del partido sería fallar, fallar y fallar, y no ganar, ganar y ganar, como diría el difunto Luis Aragonés, experto en lograr hazañas por Europa. El partido acabaría con 1-2 para los franceses, y España quedaría fuera de la Euro.
Jean Pierre Papin sería el que haría el tanto de la sentencia que dejaría fuera a España. |
- El penoso papel de España en aquella fase clasificatoria quedaría en evidencia con solo ver la clasificación, con 6 puntos finales, a 4 de Checoslovaquia y 10 de Francia. Con semejantes datos, nada quedaba que decir.
El resto ya lo conocemos. Por ese conflicto bélico en los Balcanes, al que hacía referencia anteriormente, Yugoslavia no sería aceptada para participar en la Euro de Suecia pese a haber conseguido su clasificación. Dinamarca sería la sustituta, la que por sorpresa acabaría siendo campeona de la aquella Eurocopa a la que España no asistió.
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